Suara Cooperativa y la startup AcceXible han puesto en marcha la prueba piloto de una herramienta que, a través de la inteligencia artificial, analiza el habla de las personas para proporcionar una visión inmediata de su estado emocional y cognitivo.

El procedimiento es sencillo: se hace una pregunta una persona y se graba durante 60 según su respuesta y, posteriormente, la inteligencia artificial analiza su habla. En ese contexto, los marcadores vocales pueden revelar cambios sutiles en el estado de ánimo de una persona o mostrar signos de deterioro cognitivo en esta. 

Esta información es crucial en el acompañamiento de casos de trastornos de salud mentalemocional, puesto que permite a las personas trabajadoras del sector sanitario adaptar sus intervenciones para proporcionar el apoyo más adecuado a cada persona atendida.

Por el momento, se ha llevado a cabo una primera prueba piloto con las personas que trabajan en los diferentes servicios de Suara Cooperativa, tal y como explicó la directora de comunicación y marketing de la organización, Dúnia Roselló, en la mesa redonda “Inteligecencia artificial por una mejor acción social”, organizada por la Mesa del Tercer sector, a través del m4Social, en el Mobile Wolrd Congress. El 91% de las personas que han intervenido en esta primera prueba están de acuerdo con los resultados que ha obtenido la máquina sobre su estado emocional.

Uno de los lugares donde, sin duda, puede reportar más beneficios esta tecnología es en las residencias, ya permitirá realizar una primera exploración del estado cognitivo de las personas que ingresan. Esto posibilitará ofrecerles una atención más personalizada y adecuada a las situaciones o necesidades de cada una de ellas. Posteriormente, se puede seguir haciéndole pruebas de forma periódica para realizar un seguimiento de su evolución cognitiva. De esta forma, si se registran cambios, se puede prevenir o intervenir de forma precoz en posibles casos de deterioro cognitivo.

Así, esta tecnología posibilita ofrecer un acompañamiento más preciso, personalizado y compasivo de aquellas personas con problemas emocionales o cognitivos, por lo que puede ser una herramienta muy útil para todas aquellas entidades u organizaciones que trabajan en el tercer sector, en residencias o en el ámbito de los cuidados.