Los ambientes son espacios generadores de experiencias enriquecidas en la infancia y promotores de pensamiento en los jóvenes.

Los niños son exploradores innatos del mundo que les rodea, y su experiencia educativa está profundamente influida por los espacios en los que pasan su tiempo. Desde la primera infancia hasta la juventud, los entornos físicos y materiales al alcance juegan un papel fundamental en su desarrollo cognitivo, emocional y social. En este artículo, exploraremos el impacto del diseño de los espacios en la experiencia educativa de los niños y cómo podemos optimizarlos para favorecer un aprendizaje rico y significativo.

El uso de los ambientes como herramienta educativa implica crear espacios planificados donde los niños puedan construir sus aprendizajes de forma espontánea y activa. En este sentido, el ambiente no puede entenderse sólo como un entorno y sus materiales, sino como un mundo de interrelaciones, un clima de exploración y aprendizaje.

En las escuelas gestionadas por Suara Cooperativa, estos entornos son ideados y diseñados para fomentar la exploración, el aprendizaje, el juego y la socialización de todos los niños y niñas, teniendo en cuenta su propio ritmo y maduración. Un espacio rico en materiales, colores, texturas y zonas seguras para la exploración, que favorece el desarrollo cognitivo y emocional de los más pequeños. Al mismo tiempo, los ambientes invitan a compartir y jugar con materiales diversos, mirar cuentos e interactuar con adultos y fomentar la colaboración entre niños.

La evidencia y experiencia educativa sugiere que “cada ambiente se configura como un paisaje, bajo una estética, unos materiales y unas acciones que los diferencian unos de otros” (Bonàs et al. 2007, p. 24). 

Además, la teoría de los ambientes de aprendizaje implica que a través de la idea de epigénesis, los espacios tienen la calidad de “modificarse favoreciendo la capacidad de los niños de transformar y modificar el ambiente donde se encuentran” (Ceppi y Zini, 1998), y que en consecuencia, favorece la adquisición de nuevos aprendizajes.

infants mirant un conte

Fundamentos y metodología de creación de los Ambientes:

  • Conceptualizar los ambientes con la transversalidad de las 3 áreas de aprendizaje: descubrimiento de sí mismo, del entorno y comunicación y lenguaje.
  • Enfocado en el aprendizaje autónomo y constructivo. El niño o la niña es el actor principal en la construcción de su aprendizaje, desarrollando sus necesidades de conocimiento.
  • Prioriza tareas no dirigidas y el uso de la actividad libre como principal recurso didáctico.
  • Ritmos y tempos diversos
  • Calibrar adecuadamente los retos, esfuerzo y afán de superación para que la autoconstrucción del aprendizaje se realice de forma significativa según los propios procesos de aprendizaje.
  • Organización de espacios para fomentar el aprendizaje espontáneo de niños y niñas.
  • Hacerlos accesibles y con perspectiva inclusiva. Diseñar los ambientes teniendo en cuenta las preferencias sensoriales, cognitivas y sociales individuales de los niños.
  • Realizar adaptaciones: Tener en cuenta la maduración y necesidades de los niños. (Tengan o no un diagnóstico)
  • Fomentar la interacción y la cooperación entre el alumnado de distintas edades.
  • Las educadoras son guías y acompañantes: participan como diseñadoras del espacio y después actúan como facilitadoras y observadoras para facilitar el proceso de aprendizaje.
  • Curiosidad y motivación: A partir de las emociones y los propios intereses, los niños generan y fijan de forma óptima los aprendizajes.
  • Ensayo y error: actuando comprobaciones empíricas de hipótesis, permiten al niño tomar decisiones, retroalimentarse y evaluar sus acciones.

¿Qué tipos de ambientes se trabajan en las escuelas?

  • Juego Simbólico: Representación de situaciones de la vida cotidiana para desarrollar habilidades sociales y lingüísticas.
  • Construcciones: Fomenta la creatividad y el uso de materiales diversos para aprender conceptos matemáticos.
  • Plástico-Artístico: Promueve la imaginación y la expresión artística a través de diversas técnicas y materiales.
  • Experimentos: Estimula la curiosidad y la exploración mediante las experiencias y el ensayo-error. El diseño de estos espacios deben invitar a la manipulación y la observación.

Sala sensorial i experiemental

  • Lógico y matemático: Trabaja conceptos numéricos mediante juegos y actividades lúdicas.
  • Cuentos: Fomenta la lectura, la escritura y la dramatización de cuentos para promover el gusto por la literatura.
  • Juego y Movimiento: Potencia el descubrimiento del cuerpo y sus habilidades motrices.
  • Musical – rítmico: el lenguaje musical está involucrado en el neurodesarrollo y adquisición del habla de los niños.

¿Y a etapas educativas avanzadas?

A medida que crecen, el entorno educativo se vuelve más diversificado. La disposición del aula, la decoración y la disponibilidad de recursos educativos pueden influir de forma significativa en la motivación y el aprendizaje de los estudiantes mayores. Unas aulas bien organizadas, con materiales educativos y propuestas variadas y atractivas, pueden estimular la curiosidad y participación activa en el proceso de aprendizaje y socialización. En etapas más avanzadas, como la primaria y la secundaria, también puede ser relevante para el alumnado crear espacios que estimulen a los estudiantes a colaborar, discutir y compartir sus ideas.

Los espacios exteriores también deben diseñarse

Además de los espacios interiores, las zonas exteriores son también esenciales. Los patios escolares, parques y zonas de juego ofrecen oportunidades para la actividad física, la interacción social y la exploración de la naturaleza. Es fundamental que estos espacios estén bien diseñados y equipados, para realizar actividades que promuevan el desarrollo físico y social de los niños. Además, el contacto con la naturaleza es particularmente beneficioso, ya que puede estimular la curiosidad y conciencia ambiental de los niños.

Otros entornos educativos y comunitarios del entorno

Cabe recordar que la experiencia educativa no se limita sólo a los espacios formales, como la escuela y el hogar. También incluye espacios públicos y comunitarios, como bibliotecas, museos y centros recreativos. Estos sitios ofrecen oportunidades para el aprendizaje informal y la exploración del mundo más allá del entorno educativo tradicional. ¡Busca iniciativas comunitarias en tu localidad o barrio!

En definitiva, podemos perder la oportunidad de aprendizaje que los espacios aportan a los alumnos en cualquier etapa educativa. Desde la primera infancia a la juventud, los entornos físicos pueden influir en el desarrollo sensorial, cognitivo, emocional y social. Por tanto, es esencial diseñar y mantener espacios que fomenten la exploración, el aprendizaje activo y la interacción social, para prepararlos para un futuro lleno de oportunidades y logros.

 

Para saber más:

Riera Jaume,M. A., Ferrer Ribot, M., & Ribas Mas, C. (2018). La organización del espacio por ambientes de aprendizaje en la Educación Infantil: significados, ntecedentes y reflexiones. RELAdEI. Revista Latinoamericana De Educación Infantil, 3(2), 19-39. Recuperado a partir de https://revistas.usc.gal/index.php/reladei/article/view/4726

Bonàs, M., Esteban, L., Garmendia, D., Güell, E., Mira, N., Navarro, M., Trias, I. & De Yzaguirre, A. (2007). Entramados. La experiencia de una comunidad de aprendizaje. Barcelona: Graó. 

Ceppi, G. & Zini, M. (1998). Bambini, Spazi, Relazioni. Metaprogetto di ambiente per l´infanzia. Módena: Reggio Chidren